miércoles, 1 de julio de 2009

Puedo...¿me dejas?

Puedo echarte de menos
e intentar ponerme un palillo entre los dientes
por donde se escapa tu nombre.



Puedo jugar a que te tengo al lado
e imagino tu mano debajo de mi camisa
buscando un lugar donde acomodarse,
pensar que tu respiración se agita
despeinándome el flequillo,
que me miras y te aparto la boca
porque un beso es más beso si se da con los ojos cerrados.



Puedo acariciarte con los labios
hablarte con las manos,
escucharte con los ojos
y no tendrás ni idea de lo que hago
quizá nunca llegues a saber quién soy en realidad
a pesar de haber descubierto
cuánta de tu saliva necesito para mi sed,
de haber encontrado en mí la parte frágil,
pero la debilidad está en lo que se ansía y no en lo que flaquéa,
sí, con un bombardeo de cosquillas
puedes derrumbar un gigante
pero la fuerza no está en lo que le derriba
sino en lo que le sostiene.



Puedo apostar a que no me importas
y tú doblarás la apuesta,
pero solo yo sabré si ganas o pierdes,

pues nunca sabrás en realidad cuánto me abarcas.

2 comentarios:

Gata dijo...

"Puedo apostar a que no me importas
y tú doblarás la apuesta,
pero solo yo sabré si ganas o pierdes,
pues nunca sabrás en realidad cuánto me abarcas"
es lo más bonito q he leído en muuuuucho tiempo ;)
gracias.
y sigue
muack

Genética Inexacta dijo...

Gracias a ti gata por la visita y sobre todo por la sensibilidad.
UN besote fuerte